¡En la construcción había un gran alboroto! El maestro Jan Klepka, conocido por su amor por los manjares caseros, trajo esta mañana una verdadera exquisitez: salchicha fresca directamente del cuñado del pueblo. Por supuesto, como buen gourmet, no dejó de presumir ante todo el equipo de construcción. Pero cuando llegó el mediodía y era hora de un merecido almuerzo, Klepka descubrió con horror que su querida salchicha había desaparecido sin dejar rastro!
Indignado y hambriento, el maestro rápidamente redujo el círculo de sospechosos a cuatro de sus colegas, quienes al ver la salchicha tenían un brillo en los ojos más de lo habitual. Así comienza una investigación llena de absurdo, excusas divertidas y explicaciones no necesariamente lógicas. Cada sospechoso marea como puede, y las respuestas son mareantes. ¿Quién logrará ver a través de esta investigación en un espejo distorsionado y señalar al ladrón de salchichas?
¿Podrás encontrar al ladrón antes de que termine el descanso para almorzar?